El presidente de Perú, Alan García, ordenó este domingo devolver los 5.000 dólares donados para su campaña presidencial de 2006 por una persona vinculada al clan de los Sánchez Paredes, investigados por lavado de activos procedentes del narcotráfico.
En una nota hecha pública por la Presidencia, Alan García asegura que ese dinero llegó al equipo de su campaña "durante mi ausencia y sin mi conocimiento", y que él no lo habría aceptado en caso "de conocer esa relación familiar".
La nota es una carta que el Presidente envía al abogado Humberto Acanto, que hizo de intermediario entre la secretaría del entonces candidato y Alfredo Sánchez Miranda (hijo de Orlando Sánchez Paredes), que fue quien "destapó" el donativo hecho a García.
"Como usted sabe -dice García al abogado- mi Gobierno está enérgicamente comprometido en la lucha contra el lavado de activos provenientes del narcotráfico y desde hace más de dos años, ya denunció penalmente por esos cargos a la familia Sánchez Paredes".
Ayer García ya había declarado que pensaba devolver ese dinero si se demostraba su procedencia, pues "con el narcotráfico y los lavadores de activos del narcotráfico, ni a misa", dijo tajante.
La supuesta penetración del narcotráfico en la campaña política actual -de cara a las elecciones legislativas y presidenciales de abril- ha salpicado al expresidente Alejandro Toledo tras unas acusaciones periodísticas publicadas el pasado jueves y que resultaron infundadas.
El presidente García advirtió que hay que tener cuidado a la hora de lanzar acusaciones porque "va a comenzar una salpicadura con ventilador", ya que los Sánchez Paredes son un grupo con gran poder económico en el norte del país y son "miles de personas" las que en un momento u otro han tenido negocios con ellos o han contribuido a promocionar su imagen.
En una nota hecha pública por la Presidencia, Alan García asegura que ese dinero llegó al equipo de su campaña "durante mi ausencia y sin mi conocimiento", y que él no lo habría aceptado en caso "de conocer esa relación familiar".
La nota es una carta que el Presidente envía al abogado Humberto Acanto, que hizo de intermediario entre la secretaría del entonces candidato y Alfredo Sánchez Miranda (hijo de Orlando Sánchez Paredes), que fue quien "destapó" el donativo hecho a García.
"Como usted sabe -dice García al abogado- mi Gobierno está enérgicamente comprometido en la lucha contra el lavado de activos provenientes del narcotráfico y desde hace más de dos años, ya denunció penalmente por esos cargos a la familia Sánchez Paredes".
Ayer García ya había declarado que pensaba devolver ese dinero si se demostraba su procedencia, pues "con el narcotráfico y los lavadores de activos del narcotráfico, ni a misa", dijo tajante.
La supuesta penetración del narcotráfico en la campaña política actual -de cara a las elecciones legislativas y presidenciales de abril- ha salpicado al expresidente Alejandro Toledo tras unas acusaciones periodísticas publicadas el pasado jueves y que resultaron infundadas.
El presidente García advirtió que hay que tener cuidado a la hora de lanzar acusaciones porque "va a comenzar una salpicadura con ventilador", ya que los Sánchez Paredes son un grupo con gran poder económico en el norte del país y son "miles de personas" las que en un momento u otro han tenido negocios con ellos o han contribuido a promocionar su imagen.