El paladar de LUIS XV fue superior al de su abuelo LUIS XVI, en su mesa no se ponía el sol.
Según los datos aportados por escritores e historiadores,hemos de decir que el paladar de LUIS XV
fue superior al de su abuelo LUIS XIV. Aunque se le ofrecían muchísimas fuentes, comía relativamente poco
para un monarca con las desaforadas aficiones que se le ha atribuidos ciertos autores.la principal de las comidas
reales(hablamos de masticaciones cotidianas) consumía a veces 3 horas a veces 4, mientras su majestad daba preferencia una sopa o dos, varias ensaladas, y dos carnes: tajada de ternera y lago de cordero. También se inclinaba por las perdices y unos bocados de faisán.Nada gustaba mas a LUIS XV que las compotas de
frutas y, de todas las dulzuras, el sabor de las naranjas.Dueño de un paladar exquisito y un buen catador de vinos casi divino.
MR